Por segundo año consecutivo, se llevó a cabo la Asamblea Anual de personas invidentes. Más de 3.000 asistentes se reunieron en Roquetas del Mar para participar en un programa que, además de la propia Asamblea, incluyó visitas, conciertos y actividades diversas, como recorridos por Almería, Mini Hollywood y la Base de la Legión en Viator.
Desde el punto de vista logístico, el principal desafío para Busway fue garantizar la disponibilidad de una cantidad suficiente de vehículos, una tarea especialmente compleja en ciertos destinos donde la flota existente está mayormente dedicada a otros servicios. La organización de un evento con formato MICE en estas circunstancias fue posible gracias a la estrecha colaboración con los partners locales.
La capacidad hotelera de la ciudad, aunque amplia, no permitía alojar a este número de asistentes en un único establecimiento, lo que representó otro gran reto. Coordinar traslados desde varios hoteles, con un promedio de dos o tres autocares en cada uno, hasta completar aproximadamente 60 traslados, exigió un esfuerzo extraordinario en términos de planificación y dedicación. Gestionar el aparcamiento de 60 autocares y garantizar que cada uno llegara a su hotel asignado en el momento preciso, sin afectar la circulación, requirió un trabajo minucioso.
El éxito del evento no habría sido posible sin la colaboración de los partners y la plena disposición del Excelentísimo Ayuntamiento de Roquetas del Mar. Desde el alcalde hasta los agentes de la Policía Municipal involucrados, todos demostraron profesionalidad, empatía y un compromiso absoluto para lograr que el evento fuera un éxito organizativo.
Además, se debe resaltar que este encuentro involucró a más de 3.000 personas con discapacidad visual. Lejos de representar un obstáculo, esta circunstancia brindó una experiencia enriquecedora para todos los implicados, desde jefes de tráfico hasta conductores y coordinadores. La lección de superación, alegría y ganas de vivir que transmitieron los asistentes dejó una huella imborrable.
Cada evento en el que se colabora tiene un significado especial, pero en esta ocasión, se recibió algo más: una experiencia que no solo desafió las capacidades logísticas, sino que también enriqueció profundamente a quienes formaron parte de ella.
Definitivamente, los eventos con un enfoque social tienen un valor único y transformador.